Pedagogía en Castellano y Filosofía, año de titulación 2007, Premio Universidad de La Serena promoción 2007
Cargo y Empresa Actual: Personal Investigador en Formación, UAM, España
magíster en gestión educativa (UMCE-Chile)
Doctora en educación (UAM, España)
¿Cómo definirías tu tránsito desde la Universidad al mundo laboral?
Afortunadamente fue un proceso que se dio con bastante rapidez, no tuve tiempo para asimilar que había terminado la universidad, ya que empecé a trabajar inmediatamente. De hecho, desde el colegio -donde comencé mi carrera- llamaron a la ULS para solicitar algún profesor que estuviera disponible y que hubiera tenido un buen rendimiento académico, un docente de la facultad me recomendó y al día siguiente estaba trabajando. Ahí te das cuenta que el esfuerzo por tener un rendimiento de excelencia vale la pena.
¿Qué aspectos de la formación recibida en la ULS te han servido para desenvolverte con mayor eficacia tanto en tus estudios de postgrado como en tu labor profesional?
Por supuesto que en la formación universitaria no es perfecta y sé que desde que egresé ha habido un esfuerzo por ir mejorando las mallas curriculares y la calidad de las carreras de pedagogía. Creo que la formación en el área de Castellano y Filosofía contaba en ese entonces con profesores muy preparados que te invitaban a explorar los conocimientos autónomamente e ir más allá de los establecido, de hecho el profesor Jorge Salgado (QEPD) fue la persona que me inspiró para seguir estudios de doctorado, desde que fui a su primera clase ser doctora se convirtió en mi objetivo y afortunadamente lo pude lograr. También destaco que tuve una formación con apertura a la innovación y el cambio, donde teníamos espacios para conocer y explorar los elementos fundamentales de la pedagogía. Espero que en la actualidad la carrera siga mejorando su calidad y que se convierta en una opción sólida para futuros profesores interesados en el área.
Ahora que estás inserta en el mercado laboral, ¿Cuáles crees tú que son las principales áreas que un docente debe reforzar durante su vida universitaria?
Cuando ingresas a una pedagogía eres muy joven, y cuesta un poco asimilar la inmensa responsabilidad que tendrás en pocos años más al ser profesor. Y esa asimilación es un proceso muy personal que a veces llega demasiado tarde. En mi caso, tal vez en el segundo año de carrera, me di cuenta de lo importante que era buscar instancias de auto-formación, como por ejemplo hacer clases particulares, leer cosas que complementen lo que te enseñan en la universidad y evitar tomar los contenidos como elementos para memorizar. Es cierto que no todas las asignaturas son interesantes pero de todas se pueden sacar lecciones. Lo peor que puede hacer un futuro docente es intentar pasar los ramos memorizando los contenidos con el único fin de aprobar, ese profesor tendrá serios problemas cuando comience su carrera. Evidentemente la experiencia en aula será fundamental para aprender a ser docente, pero debe existir una actitud abierta y flexible para aprovechar los años de estudio, especialmente las clases de metodología y de evaluación.
¿Cuáles crees tú que son las competencias clave que debe tener un docente hoy en día?
Según mi experiencia como educadora, uno de los elementos fundamentales es tener vocación, ganas de enseñar, ganas de generar en ese estudiante un cambio de mentalidad. Un profesor debe ser capaz de despertar a los niños, fomentándoles el pensamiento crítico y autónomo, para lograrlo debe ser un profesor que lee, que se informa, que debate, que se hace parte de la contingencia. No puede ser un docente indiferente a lo que sucede en el mundo. También creo que otra de las competencias clave de un docente es que maneje los conocimientos de su área, siempre abierto a seguir aprendiendo ya que actualizarse constantemente es otro elemento fundamental. Con el pasar de los años hay que evitar el estancamiento intelectual.
Tú que has tenido la oportunidad de desarrollar tu carrera profesional en el extranjero, ¿Qué recomendaciones darías a otros profesionales de tu área que estén interesados en realizar estudios similares?
Puede sonar una frase cliché, pero la verdad es que es muy cierto que toda meta se logra con esfuerzo. Para mí haber obtenido una Beca Chile para hacer el doctorado en España no fue un regalo que me llegó de un día para otro, sino que fue el resultado de un tremendo trabajo que estuve realizando desde que ingresé a Castellano y Filosofía en la ULS. Siempre intenté ser la mejor del curso, sin pasar por encima de nadie, sino que asistiendo a clases y estudiando duro. Después hice un magíster en Santiago viajando todos los fines de semana, mientras al mismo tiempo trabajaba 44 horas en un colegio. Todos estos esfuerzos tuvieron como consecuencia un rendimiento de excelencia que me posibilitó adjudicarme esta beca. Creo que todos aquellos estudiantes que sientan esa inquietud de superación personal y académica deben trabajar para ello desde los primeros años, lo que no significa renunciar a la vida de un joven normal. Yo iba a todas las fiestas de la ULS y, por eso, no dejaba de estudiar, la clave es organizar bien el tiempo entre la diversión y los estudios universitarios. Ojalá muchos estudiantes se pusieran como meta salir de Chile a estudiar, es una experiencia única que te permite no sólo adquirir conocimientos académicos sino que por sobre todo culturales y personales.
¿Qué consejos profesionales les darías a tus futuros colegas que se encuentran ad portas de ingresar al mundo laboral?
Les diría que siguieran su vocación y que siempre la pusieran por delante de los típicos conflictos de los primeros años. Que se esfuercen por generar cambios en sus estudiantes, para lograr por sobre todo la autonomía y el pensamiento reflexivo en cada uno de ellos. Que en el fondo intenten siempre que los niños y niñas “aprendan a aprender” porque eso es algo que jamás olvidarán, que les den las herramientas necesarias para la auto-exploración y para la desarrollo de un pensamiento crítico que les permita desenvolverse en cualquier contexto.